Las habilidades blandas son un conjunto de competencias sociales que facilitan las relaciones interpersonales. Entre ellas se encuentran la inteligencia emocional, el liderazgo, la resiliencia, la empatía y el pensamiento crítico.
Actualmente, las habilidades blandas son muy valiosas para las empresas, ya que ayudan a afrontar los desafíos laborales, aseguran el bienestar entre los trabajadores, incrementan la productividad, y generan ambientes de trabajo donde existe optimismo, motivación, comunicación y empatía.
En este artículo queremos contarte más sobre qué son las habilidades blandas, su importancia y cómo puedes desarrollarlas en tu empresa.
Por lo general, el valor de un trabajador se mide por la cantidad de conocimientos y competencias técnicas que este posee.
Se considera que, mientras más experiencia y destrezas tenga el empleado, este será mejor considerado y tendrá mayores posibilidades de ascender de puesto o de tener a su cargo áreas de la empresa.
Si bien estas habilidades siguen siendo importantes, las empresas también valoran las competencias sociales, que son las habilidades blandas; las cuales se concentran en la capacidad del empleado para relacionarse con los demás, comunicarse, escuchar al otro, gestionar su tiempo y ser empático.
Esto quiere decir que un empleado no solo será valioso por sus conocimientos, experiencia y destrezas, sino por sus habilidades blandas, las que le permitirán realizar su trabajo de manera eficiente y satisfactoria.
Y es que una persona puede tener excelentes capacidades técnicas para el trabajo, pero si no es capaz de incluir estas habilidadesen sus funciones; las cuales le permitan gestionar su tiempo, trabajar en equipo, expresar lo que piensa, criticar de forma constructiva y apoyar a los demás; es posible que no consiga el éxito.
Existen 10 tipos de habilidades blandas que son muy requeridas por los empleadores, y que, sin duda alguna, ayudan a que el trabajo en la empresa sea más eficiente, empático y en equipo:
Desarrollar habilidades blandas es un proceso que requiere de una tarea de autorreflexión.
Por eso, es importante que una empresa decida qué tipo de habilidades blandas quiere que sus empleados desarrollen. De este modo, será más claro qué tipo de entrenamiento necesitarán para obtenerlas y ponerlas en práctica.
De todas formas, existen 4 maneras que nos ayudarán a desarrollar las habilidades blandas que debes tener en tu empresa:
Las habilidades blandas como la resiliencia y la inteligencia emocional ayudan a que los empleados estén preparados para el cambio. En este sentido, se recomienda promover las habilidades blandas entre los empleados a partir de dos de sus principales ventajas: la mejora del rendimiento y que estas se pueden aprender.
A partir de ejemplos simples sobre habilidades blandas tales como los beneficios de escuchar activamente, de la empatía y la comunicación; los empleados considerarán el impacto que estas pueden generar en el ambiente y la experiencia de trabajo.
No es posible saber cómo mejorar o desarrollar habilidades blandas en el lugar de trabajo hasta que se sepa qué habilidades blandas necesitan mejorar.
Entonces, antes de que los empleados lleven cursos o capacitaciones sobre estos temas, es esencial reconocer qué instrucción necesita cada empleado para el desarrollo de las habilidades blandas.
Se recomienda que los empleados reconozcan en qué habilidades sociales son buenos, así como ser honestos con ellos mismos sobre qué capacidades sociales necesitan mejorar. Por lo general, la autoevaluación y retroalimentación de 360 grados es la mejor manera de identificar con qué habilidades ya cuentan los trabajadores, y cuáles son las que quieren incorporar.
Las charlas, los eventos, las convenciones y las capacitaciones pueden ayudar a que los empleados cobren consciencia sobre la importancia de las habilidades blandas, cuáles son las que ponen en práctica, y cuáles podrían aprender.
Por eso, recomendamos que la empresa elabore distintos tipos de actividades para promover y enseñar la importancia de estas habilidades en la empresa. De hecho, preferir entrenamientos en línea puede ser muy provechoso, ya que los empleados pueden llevar cursos de capacitación a su propio ritmo o si trabajan de forma remota.
Cuando los empleados comiencen a incoporar las habilidades blandas en el trabajo, la mejor forma de asegurar estos nuevos conocimientos y su puesta en práctica es que obtengan retroalimentación constante sobre sus avances.
Es importante tener en cuenta que desarrollar estas habilidades en la empresa puede tomar un tiempo considerable, ya que al fin y al cabo se trata de capacidades sociales que muchas veces requieren de cambios en la forma de pensar y en el estilo de vida de las personas.
Ahora que ya conoces más sobre las habilidades blandas, sus características y cómo promoverlas en tu empresa, te invitamos a ponerlas en práctica. Serán de una gran ayuda para crear espacios de trabajo que promuevan el bienestar y la productividad.
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